La migraña es una enfermedad que ataca constantemente a los ciudadanos. Además, se vuelve impredecible, por lo que es necesario saber como detectarla a tiempo para combatirla.
En la Policlínica Metropolitana te enseñaremos todo lo necesario para que sepas actuar correctamente ante esta situación.
¿Qué es la migraña?
Es una cefalea primaria, es decir, que el dolor de cabeza se convierte en el primer síntoma de la enfermedad. Migraña y jaqueca son sinónimos y ambos términos describen lo que se conoce como crisis o ataques de dolor de cabeza con varios síntomas asociados que se presentan de manera episódica y recurrente.
El dolor suele ser insoportable
Cualquier de dolor de cabeza no es migraña. Esta enfermedad pueden ocasionar palpitaciones de intensidad variable. Por lo general, de un solo lado de la cabeza junto a otros síntomas comunes como la sensibilidad a la luz, al sonido y las náuseas.
En el diccionario encontramos esta definición de migraña: “Dolor fuerte de cabeza que afecta, generalmente, a un lado o una parte de ella y a menudo va acompañado de náuseas y vómitos”.
Para la Organización Mundial de la Salud (OMS) la migraña crónica es considerada como una enfermedad discapacitante que llega a obstaculizar la cotidianidad de las personas. Es la tercera dolencia que más afecta a los seres humanos y se la considera una de las veinte molestias más debilitantes.
¿Cuánto dura un ataque de migraña?
Los ataques de migraña pueden durar horas o días, y el dolor puede ser tan intenso que llega a interferir en las actividades diarias. Las personas que padecen esta enfermedad crónica refieren que experimentan señales de advertencia, que es lo llaman aura.
Las señales pueden ser alteraciones de la visión, destellos de luz o puntos ciegos, visión borrosa o distorsionada. Irritabilidad, hormigueo de una parte de la cara, incluso de un miembro superior (mano o brazo), de una pierna o un pie. Otras personas llegan al extremo de experimentar dificultad para articular palabras o alteraciones de la audición.
En la actualidad existen medicamentos preventivos y analgésicos altamente efectivos para tratar las migrañas y reducir la intensidad del dolor que causan, pero no la curan.
El tratamiento debe ser indicado por un médico y ha de estar acompañado de cambios en el estilo de vida, incluyendo la alimentación o la sustitución de ciertos hábitos.
¿Cuáles son las causas?
El estrés es uno de los causantes de la migraña
Si bien no están del todo precisas las causas de la migraña, hay factores genéticos y ambientales que influyen en la manifestación de esta enfermedad. Se la considera una enfermedad de carácter hereditario y en las familias suele ocurrir que se está identificado el pariente migrañoso.
Una persona que padece de migraña debe llevar buenos hábitos e higiene de vida. Así podrá controlar los desencadenantes y reducir los cambios que estimulan la aparición de ataques. Se sabe que la migraña está acompañada de señales de advertencia previos al dolor, también hay señales que acompañan al paciente durante el ataque y al culminar la fase de dolor.
Especialistas en Neurología resaltan que los cambios en el tronco encefálico y la forma cómo se produce la interacción con el nervio trigémino (que es una vía importante de dolor) podrían ofrecer explicación.
Se investiga el desequilibrio de determinadas sustancias químicas propias del cerebro, como la serotonina, que interviene en la regulación del dolor en el sistema nervioso. Así como también se analiza el rol de la serotonina en las migrañas y el papel de otros neurotransmisores, como es el péptido relacionado con el gen de la calcitonina (CGRP).
¿Cuál es el origen de la migraña?
Esta enfermedad evita que la persona se concentre
Primero debemos preguntarnos ¿qué es el dolor de cabeza? El cerebro en sí no duele, lo que duelen son las meninges, aclaran los expertos. Las meninges son tres membranas recubren el cerebro y la médula espinal y su función es proteger el sistema nervioso central.
Cuando las meninges se inflaman provocan la sensación de dolor que es transmitida al cerebro a través del nervio trigémino, eso provoca el dolor de cabeza, o sea, la migraña.
Hay ataques altamente discapacitantes que impiden realizar las actividades habituales. La OMS considera que un ataque de migraña se asemeja a una tetraparesia, que es la disminución de la movilidad en piernas y manos. Por ello se la cataloga de invalidante y de condición de enfermedad crónica, aunque no hay certificación con validez legal.
¿Cuáles son sus etapas?
Las primeras migrañas pueden aparecer en la infancia, adolescencia o edad adulta temprana. Cada una pasa por cuatro etapas: pródromo, aura, ataque y posdromo, aunque esta no es una regla universal.
Pródromo
Se manifiesta uno o dos días antes de una migraña. Pueden ser señales de advertencia, tipo estreñimiento, cambios en el ánimo (depresión o euforia), antojos por alguna comida, tensión muscular, ganas recurrentes de orinar o bostezos frecuentes.
Aura de migraña
Puede ocurrir antes o durante las migrañas. Suelen ser alteraciones visuales, como destellos de luz, puntos brillantes, visión borrosa, hormigueo o debilidad de un lado del cuerpo, que se manifiestan de forma gradual.
Ataque
Para algunas personas pueden ser poco frecuentes o aparecer varias veces al mes. En esta fase se pueden presentar síntomas como: dolor de un lado de la cabeza, a menudo de ambos lados. Dolor generalmente en un lado de la cabeza, pero a menudo en ambos lados.
Postdromo
Esta puede estar acompañada de agotamiento, confusión mental y la sensación de sentirse sin fuerzas. Algunas personas expresan euforia o hiperactividad. En esta fase queda la sensación de que el movimiento repentino de la cabeza podría provocar de nuevo dolor.
¿Qué desencadena la migraña?
Entre los factores desencadenantes, se destacan:
Los cambios hormonales propios de las mujeres. Las variaciones en la producción de estrógeno (antes o durante la menstruación), el embarazo y la menopausia
Los medicamentos propiamente hormonales. Anticonceptivos orales y la terapia de reemplazo hormonal. En cambio hay mujeres que manifiestan presentar migrañas con menos frecuencia cuando les son administrados estos medicamentos
Ciertos tipos de bebidas y alimentos. En especial vino, café, té y otras que contienen cafeína, chocolate, quesos madurados, productos de charcutería, alimentos salados. Ingredientes como el glutamato monosódico (ajinomoto), colorantes artificiales y edulcorantes artificiales. La hidratación inadecuada, también puede ser una causa.
Estrés. La presión de trabajo o situaciones tensas en el hogar pueden causar migrañas.
Estimulaciones sensoriales y agentes químicos. Las luces brillantes, el resplandor del sol y los sonidos fuertes. Los olores fuertes, bien sea de perfumes, disolventes de pintura, olor a gasolina, humo de tabaco o el que proviene de la quema de materiales
Alteraciones del sueño y horarios de comida. No dormir suficiente o dormir demasiado, así como inclumplir los horarios habituales de las comidas.
El esfuerzo físico intenso, el cambio de condiciones climáticas (por variación de presión, por ejemplo estar cerca del mar) y medicamentos para otras enfermedades.
¿Cuándo acudir al médico?
Usualmente las migrañas no se diagnostican ni se tratan. También es cierto que es uno de los trastornos neurológicos más comunes y una de las causas más frecuentes de consulta de pacientes pediátricos y jóvenes.
Si presentas con frecuencia signos como los mencionados, te sugerimos que lleves un registro detallado de lo que sientes (indica si tienes señales de alerta y duración del dolor de cabeza), detalla la frecuencia e intensidad del dolor. Entonces puede ser el momento de pedir una consulta médica con un especialista en Neurología para hablar de lo que te preocupa de tus dolores de cabeza.
El dolor puede ser tan intenso que el ver cualquier objeto dolerá
Para el registro presta especial atención a dolores de cabeza que
Se extiendan por más de tres días
Te obliguen a disminuir la productividad
Se convierta en impedimento para asistir al colegio, a la universidad o no te permita cumplir las actividades propias del entorno laboral
Repercuten en los hábitos de vida o cuando el paciente sienta que lo saca del sueño
La atención médica debe ser inmediata cuando presentes
Dolor de cabeza con fiebre o rigidez en el cuello, acompañado de mareo, convulsiones o dificultad para hablar}
Dolor de cabeza tipo trueno o repentino
Dolor de cabeza atípico después de los 50 años
Familiarízate con los síntomas y presta atención a lo que experimentes luego de estar, por ejemplo, en ambientes ruidosos
Conocer tu cuerpo y cómo responde a los diversos estímulos puede ser información valiosa para ti y para el especialista.
Hay que atacar la migraña a tiempo y seguir las indicaciones médicas para tratar de reducir la frecuencia de los ataques y minimizar el dolor. Es necesario ser preventivo con la enfermedad y saber cuáles son los desencadenantes de cada paciente.
Minimizar los cambios bruscos, conocer cómo se comporta tu cuerpo, y llevar una vida diaria rutinaria apegada a alimentación saludable, eliminando los factores desencadenantes, realizar ejercicio cardiovascular suave, controlar los estímulos, reducir los niveles de estrés y descansar lo que nuestro organismo necesita.
Quienes padeces esta enfermedad crónica pueden desempeñarse en los diversos aspectos de su vida, tanto en lo físico y lo emocional, como en lo social y laboral. Por ello es importante tener un tratamiento efectivo, que reduzca la frecuencia de los episodios y que su vida tenga la mejor calidad posible.
